Desmontando las “Red Flags”. ¿Será este el futuro de la selección?

Mi camino académico y profesional ha sido todo menos convencional. Comencé en el mundo de los números (finanzas), pero siempre supe que mi verdadera misión era acompañar a las personas y así intentar a generar un impacto positivo directo en sus vidas.

Desde pequeña, sentí una profunda vocación de ayudar y solidarizarme con los demás. Después de años, tomé un gran salto en mi carrera y me formé en psicología organizacional para adentrarme en el mundo de HR.

Mi trayectoria profesional, corta, por el momento, pero intensa, me ha enseñado cosas que no se aprende ni en carreras ni en másteres. Soy una apasionada de mi profesión y cada vez me gustan más los nuevos desafíos que me hacen desarrollar mi creatividad dentro de este campo. Siempre he creído en el valor de las personas y en el gran poder que tiene la comunicación, por eso, para mí, saber adaptar tu comunicación es algo primordial para conectar con los demás, pero más importante es ser siempre fiel a uno mismo y no tomarse las cosas demasiado en serio.

Mi corta pero intensa carrera profesional ha sido un viaje lleno de aprendizaje y crecimiento. Desde que me adentré en el mundo laboral, siempre he tenido claro que el gran valor de las empresas son las personas, y por supuesto, tenía claro que mi foco tenía que estar en ellas. Empezar en Teamtailor me ha ayudado a encontrar mi verdadera vocación: ayudar a las empresas a crecer con el mejor equipo posible.

Y para que me conozcáis un poquito mejor (que no todo es trabajo), soy una amante de los animales, y pasar horas con mi perro y subida en un caballo es lo que más feliz me hace, y lo que me ayuda a poder seguir dando cada día el 100% en mi trabajo.