El ROI del Employer Branding: cómo medir el impacto real en la atracción de talento

Avatar of María Camila Romero

María Camila Romero

Soy Cami, Marketing Manager de Teamtailor para LATAM. Amo leer biografías porque muestran algo en lo que creo profundamente: que debemos ser felices en aquello en lo que trabajamos y donde invertimos la mayor parte de nuestro tiempo. Esa idea es la que me conecta con el mundo de los RR. HH., porque se trata justamente de crear espacios y procesos que nos permitan disfrutar de lo que hacemos cada día.

Durante años, muchas compañías invirtieron fuertemente en Employer Branding: campañas visuales, slogans inspiradores y páginas de carrera pulidas. Sin embargo, los candidatos hoy detectan fácilmente la diferencia entre lo que se promete y lo que realmente se vive.

La cultura, lo que los empleados y candidatos experimentan día a día, ya no es algo que simplemente se comunica; es aquello que define la marca empleadora. Este cambio, que lleva tiempo gestándose, hace que medir el ROI (retorno de la inversión) del Employer Branding deje de ser una opción para convertirse en una necesidad estratégica. No basta con generar impresiones o visitas; se trata de evaluar su impacto real en atraer, contratar, retener y movilizar talento alineado, comprometido y productivo.

Cultura + Marca: la combinación que importa

Algunos puntos claves que ilustran por qué la cultura se ha convertido en la esencia del employer branding:

  • Autenticidad antes que apariencia: Los candidatos leen reseñas en Glassdoor, escuchan a empleados actuales o pasados, observan cómo se ve el día a día. Cuando lo que se prometía en una campaña no coincide con la experiencia real, la reputación sufre.
  • Retención vs. rotación: No importa cuántas personas ingresen; lo que realmente desgasta presupuestos y genera costos ocultos es cuando la rotación es alta, especialmente en los primeros meses. Un employer brand sólido ayuda a evitarlo.
  • Experiencia del candidato igual experiencia del empleado: Cómo se siente alguien al interactuar con la empresa durante el proceso de selección (rapidez, transparencia, trato humano) es señal clara de la cultura interna.
  • Transparencia digital: Las reseñas en línea, opiniones de empleados, redes sociales y otras plataformas amplifican cualquier brecha entre lo que se dice y lo que se hace.

Datos recientes que respaldan por qué vale medir (y cómo hacerlo bien)

Aquí algunos estudios, estadísticas y tendencias actualizadas que muestran el impacto tangible del employer branding:

  • Reducción de rotación

    Según Universum, una marca empleadora sólida puede reducir la rotación hasta en un 28% y disminuir el costo por contratación en cerca de un 50%.

    Menos rotación = menos gastos de reemplazo, capacitación y pérdida de productividad. Menor costo de contratación = ahorro directo en presupuesto de reclutamiento.

  • Comunicación de resultados

    Un informe de The Conference Board indica que el 78% de las organizaciones invierte en employer branding, pero solo el 41% mide el retorno de inversión y apenas un 18% comunica los resultados de manera clara. Sin métricas, es difícil justificar inversiones. Quienes sí miden pueden demostrar ahorros, eficiencia y valor estratégico frente a la dirección.

  • Menos costos de contratación

    De acuerdo con estadísticas recopiladas por DSMN8, las empresas con una marca empleadora fuerte reportan hasta un 50% menos en costos de contratación, un 50% más de candidatos cualificados y una reducción importante en el tiempo necesario para cubrir vacantes. Atraer candidatos más alineados desde el inicio significa menos gasto en filtros, entrevistas fallidas y procesos repetidos. También acelera la operación.

  • Respuestas oportunas

    Una investigación citada por Vouchfor señala que el 83% de los candidatos consulta reseñas de empresas antes de postularse, y que el 70% estaría más dispuesto a aplicar si la compañía responde de forma activa a esos comentarios. Gestionar la reputación online aumenta el volumen de candidatos interesados y mejora la tasa de aceptación de ofertas, lo que reduce vacantes abiertas.

  • Incremento en el compromiso interno

    Según Hoopshr, un employer branding sólido eleva el compromiso interno, reduciendo rotación, niveles de estrés y ausentismo, mientras incrementa productividad y satisfacción del cliente.

    Empleados más comprometidos = mejor rendimiento, menor ausentismo y mayor lealtad, lo que se traduce en ingresos sostenibles y ventaja competitiva.

  • Impactos en la tasa de aceptación

    Según CareerPlug (2025), el 66% de los solicitantes aceptó una oferta de trabajo principalmente gracias a una experiencia del candidato positiva.

    Aumenta la tasa de aceptación de ofertas, reduce el tiempo de vacantes abiertas y disminuye los costos asociados a rechazos tardíos o negociaciones adicionales.

Métricas que realmente importan

Para no quedarse solo con lo visible o lo “bonito”, hay que medir desde varios ángulos.

Aquí algunas métricas concretas que pueden servirte para demostrar ROI, con formas prácticas de capturarlas:

Tiempo de contratación (Time-to-Fill / Time-to-Hire)

Establecer una línea de base antes de hacer iniciativas de employer branding, para comparar cuánto se reduce el tiempo tras mejoras en marca, visibilidad del EVP, procesos de reclutamiento más claros.

Ejemplo: campaña de branding bien orientada → roles difíciles de cubrir se llenan más rápido = menos días sin productividad.

Costo por contratación (Cost-per-Hire)

Aquí entran costos directos (publicidad, agencias, plataformas), pero también los indirectos (tiempo de los reclutadores, entrevistas fallidas, onboarding). Si el employer branding atrae más candidatos adecuados de entrada, se reduce el esfuerzo y el costo en todo el funnel.

Tasa de aceptación de oferta (Offer Acceptance Rate)

Seguimiento de cuántas ofertas enviadas son aceptadas, y razones de rechazo. Una marca fuerte con un EVP bien comunicado puede aumentar la tasa y reducir el “ghosting” o rechazos de última hora.

Calidad de contratación (Quality of Hire)

Medida mediante desempeño en los primeros 6-12 meses, feedback de supervisores, alineamiento cultural. También se puede medir con tasa de rotación temprana (p.ej. cuántos se van en los primeros 3-6 meses).

Retención / rotación voluntaria

Observar cuánto tiempo permanecen las personas, especialmente los nuevos ingresos, y comparar antes y después de intervenciones de employer branding o mejoras de cultura. Costos asociados al reemplazo, al entrenamiento y al tiempo que no se está siendo productivo.

Engagement y satisfacción interna

Encuestas de clima, eNPS (Employee Net Promoter Score), encuestas puntuales (pulse surveys) También análisis de sentimiento de reseñas de empleados en plataformas externas (Glassdoor, Indeed) pueden dar pistas de gaps de marca interna vs. externa.

Métricas de marca externas
  • Visitas y conversiones en la página de carreras.
  • Tráfico orgánico vs. pagado.
  • Visitas al perfil de empresa, reseñas, calificaciones.
  • Interacción en redes sociales, shares, recomendaciones de empleados.

Indicadores financieros / de negocio

  • Ahorros derivados de menor rotación, menor dependencia de contratación externa o costosa.
  • Productividad: cuánto tarda un nuevo empleado en “estar al nivel esperado” (time-to-productivity).
  • Ingresos por empleado (cuando aplicable). Aunque no siempre sea fácil calcularlos, sirven cuando la empresa tiene datos de desempeño vinculados al talento.

Cómo alinear las acciones con los objetivos y reporte del ROI

Para que el ROI sea reconocible y tenga peso en la organización, es clave:

  • Definir objetivos claros desde el principio: ¿quieres reducir rotación? ¿llenar vacantes más rápido? ¿atraer más talento remoto? Cada objetivo requiere métricas distintas.
  • Establecer una línea base (baseline) para comparación: medir cómo estaban los KPIs antes de lanzar las iniciativas de employer branding / cultura, para poder mostrar mejoras.
  • Priorizar la consistencia: la cultura no cambia de la noche a la mañana. Las iniciativas deben mantenerse con coherencia para que los efectos visibles se acumulen.
  • Involucrar líderes en todos los niveles: quienes lideran son quienes modelan los comportamientos. Si la cultura no se vive desde la gerencia, las campañas externas pierden credibilidad.
  • Aprovechar tecnología & datos: herramientas de análisis de talento, plataformas de clima laboral, herramientas de seguimiento de candidatos, análisis de reseñas (sentiment analysis), etc.
  • Reportar en lenguaje que entienda la dirección: traducir métricas de talento en impacto económico —por ejemplo: “esta reducción de rotación evitó X EUR / X USD / pérdidas de productividad estimadas” o “este ahorro en tiempo-de-contratación permitió que los proyectos empezaran antes, lo que generó X resultados”.

Desafíos comunes y cómo superarlos

  • Atribución difícil: ¿cómo saber si fue la campaña, o la mejora en beneficios, o la reputación del mercado, lo que generó una mejora? Respuesta: usar experimentos (A/B testing), pilas de medición, periodos de comparación o cohortes.
  • Silencios internos: métricas aisladas que no se comparten, o resistencia cultural a reconocer fallas. Necesario liderazgo transparente.
  • Datos dispersos: los datos sobre aplicación, desempeño, rotación, engagement, etc., suelen estar en diferentes sistemas y departamentos. Integrarlos es esencial.
  • Expectativas poco realistas a corto plazo: los cambios culturales pueden tardar meses en reflejarse en métricas como retención. Pero algunos indicadores (candidate experience, tasa de aceptación, visitas a la página de empleos) pueden moverse antes.

Cómo transformar tu marca empleadora en impacto real

El ROI del employer branding no se mide en campañas virales ni en la cantidad de seguidores en redes sociales. Su verdadero valor está en atraer al talento adecuado, cerrar procesos de selección más rápido, reducir costos de contratación y, sobre todo, en retener a las personas para que se conviertan en embajadoras de tu cultura.

En este camino, contar con la tecnología adecuada marca la diferencia. Teamtailor te ayuda a medir y optimizar cada etapa del proceso de atracción y selección: desde el análisis del candidate journey hasta métricas como tasa de aceptación, tiempo de contratación y experiencia del candidato. Todo en una sola plataforma diseñada para potenciar tu marca empleadora y demostrar su impacto real en el negocio.